José de Jesús Vázquez Hernández
Este mes de septiembre además de las celebraciones patrias también tenemos que escuchar los informes de los líderes de los diferentes niveles y ámbitos de gobierno, informes a medias, en los que nos inundan de spots con las puras buenas, que dicen que cuentan, dejando de lado lo que más le importa al ciudadano y que igual cuenta.
A estas celebraciones e informaciones damos “el grito” oficial y los gritos no oficiales producto de la inseguridad, de las madres que tienen a hijos desaparecidos, aunados a los gritos de las numerosas personas a causa de la muerte de sus familiares y múltiples daños materiales causados por los sismos y huracanes en Chiapas y Oaxaca.
Primero el presidente de la República, Enrique Peña Nieto, inicia este ceremonial con base en el formato del informe presidencial, que toma un cariz especial en cada administración según les conviene en los que anuncian obras efectuadas y posibles a realizar, sin embargo, no llegan a trascender entre la población que ve y califica lo que mejora en su persona, en su familia o en su comunidad.
Generalmente etos informes van precedidos días antes y después del mismo con anuncios o spots, que tratan de concientizar al ciudadano de que están haciendo su labor con transparencia, dejando en el camino cosas que lastiman a los ciudadanos, pues hace falta que haya más seguridad, educación, salud, cultura y menos baches y gastos excesivos en obras, burocracia y pensiones de poderosos.
La clase política ya calienta motores, pues se aproxima el tiempo de las campañas electorales en México y en varias entidades federativas, y desde que estos personajes toman la decisión de encarrilarse por la vía de la actividad política, deben estar conscientes de las obligaciones y responsabilidades que adquieren a partir de recibir el voto o bien el nombramiento.
Al referirnos a la “Política”, se puede entender como la obra escrita por Aristóteles en el siglo quinto antes de Cristo, o bien a su significado, el cual tomó relevancia con base en este tratado, y desde entonces se le ha dado diferentes acepciones, una de ellas puede referirse a la “actividad orientada en forma ideológica a la toma de decisiones de un grupo para alcanzar ciertos objetivos”.
Otra definición es la “manera de ejercer el poder con la intención de resolver o minimizar el choque entre los intereses encontrados que se producen dentro de una sociedad” ambos conceptos especifican de manera clara el sentido de la política que proviene a su vez de la palabra griega polis referente a la administración del gobierno de una ciudad.
Estos informes tienen su base en lo dispuesto por el artículo 69 de la Constitución Política y las particulares de los estados y leyes municipales, el cual señala: “En la apertura de sesiones ordinarias del primer periodo de cada año de ejercicio del Congreso, el Presidente de la República presentará un informe por escrito, en el que manifieste el estado general que guarda la administración pública del país”.
En ese tenor es importante que estos servidores públicos, como se les ha dado en llamarse, manifiesten a la población el estado general que guarda la administración pública en cada uno de sus diferentes periodos gubernamentales, pero deben tomar en cuenta las buenas y las malas, así como los pecados de acción y omisión para que se justifique tanto el acto como el costo.
Septiembre 16/2017