José de Jesús Vázquez Hernández
El gobernador del estado de Jalisco, Jorge Aristóteles Sandoval Díaz, de manera inusual se presentó a rendir su quinto informe de gobierno, pues era costumbre hacerse acompañar por una gran parafernalia y un séquito que hacía cola para acercarse al gobernador en turno y saludarlo, una ceremonia que la gente de a pie identificaba como el besamanos, por lo general efectuada en el teatro Degollado.
En esta ocasión el quinto informe de gobierno fue presentado el día primero de febrero, un día antes del disfrute de los tamales en la fiesta de la Candelaria, cuando los peregrinos acuden a venerar la imagen de San Juan de los Lagos y la ciudad es abarrotada por devotos, pues bien, el informe se presentó en las instalaciones de Artes Escénicas, ante un gran número de invitados.
El informe se destacó por contar mucho de lo bueno, que cuenta, pero faltó comentar más sobre lo que hace falta y que también cuenta, destacó los logros en materia de empleo, apoyo a la educación, a las pequeñas y medianas empresas, el desarrollo en turismo, las bonanzas del campo, combate a la pobreza, apoyos a las mujeres y a diferentes programas que impulsan bienestar.
Continuó proclamando las bondades y maravillas del Estado, eludió o poco dijo de algunas carencias y dificultades que han dado mucho de qué hablar en los últimos días, como la homologación de las policías metropolitanas que se ha politizado y pareciera que en lugar de desenredar la madeja, la enredan cada vez más, no obstante el gobernador dice se las den y él si puede.
El problema de la atención de la salud, la deuda del seguro popular y el enredo en las cuentas del anterior director de la Secretaría de Salud, la carencia de medicinas, cómo aumentar el poder de compras y evitar la inflación de todos los días, la molestia de la movilidad que está en proceso de mejora, si bien, una vez que se resuelva al menos una parte, ésta ya es insuficiente, pero algo es algo.
Una de las cosas que más requiere atención por parte de las autoridades es el combate a la violencia, a la corrupción, a la impunidad, al robo constante a transeúntes, a casa habitación, a los negocios, al transporte de carga, al secuestro y desaparición de personas y qué decir de los feminicidios y robo de conejeros y al de personalidad, entre otros.
Aceptó que no son suficientes los avances en seguridad y justicia, para que haya mejoras se requiere todo un proceso de estudio, buena voluntad y recursos, pues las reformas no han dado el resultado esperado y no se ve cuando ni por dónde, incluso el inmueble que alberga la justicia, según reportan, se está hundiendo, por caro y mal hecho, igual pasa con el sistema de salud.
Finalmente el gobernador se comprometió en el tiempo que le queda a resolver cinco retos relacionados con el empleo, en los que Jalisco es líder en creación de empleos, seguridad relacionada con la Fiscalía General, Fiscalía Especializada en la atención a mujeres y desaparición de personas y en movilidad, en cuyas áreas falta más responsabilidad.
En su administración se han alcanzado logros importantes, Jalisco ha recuperado el liderazgo en varios aspectos, ha sido relevante el trabajo en innovación en tecnología, en producción de alimentos, algo se ha hecho en movilidad, en el cuidado del medio ambiente, sin duda son cosas buenas que vendrán a proporcionar mayor bienestar a los habitantes de esta entidad.
Febrero 2/2018